Saltar al contenido
Cultivos Hidroponicos

Cultivo casero hidropónico de la espinaca

espinaca

El cultivo de la espinaca no es muy diferente al de otras hortalizas de hojas verdes, esta planta ofrece muchas ventajas nutritivas y deliciosas, tiene un alto contenido de hierro, también tiene aminoácidos, vitamina A, ácido fólico y varios antioxidantes.

Esta planta es muy resistente y pueden usarse varias técnicas para su cultivo.

Una de ellas es el sistema hidropónico, la ventaja que nos ofrece esta técnica es que puede ofrecer una mayor oxigenación y en consecuencia la planta logra desarrollarse mucho más rápido a diferencia de lo convencional en el suelo.

¿Cómo cultivar la espinaca en casa?

En este caso utilizaremos la técnica hidropónica de raíz flotante por que es más fácil y no se necesita de mucha inversión para empezar, técnica casera ideal para empezar.

SIEMBRA

Lo primero que haremos será sembrar la semilla para poder germinar, esto se puede hacer usando un sustrato como arena gruesa de construcción pero limpia, solo se echaremos agua hasta que salgan las 4 hojas de tamaño considerable, recuerda que cuando sale las 2 primeras hojitas se llama cotiledón y no necesariamente son hojas pues esas aun faltan desarrollarse para tal.

GERMINACIÓN

Luego de 20 días aproximadamente (esto puede variar) ya debería haber terminado la etapa de la germinación, te darás cuenta por el tamaño de las hojas.

La planta de espinaca germina a temperatura ambiente y es mejor descartar  las que aún no crecen o están delgadas porque más adelante seguramente tendrán problemas. 

TRANSPLANTE

Luego de haber completado la germinación lo que sigue es transplantar la planta al sistema hidropónico de raíz flotante, antes de hacerlo procurar limpiar suavemente cada planta seleccionada.

Poner cada planta en su recipiente, en este caso usaremos un vasito con agujeros en la parte inferior para el drenaje, como sustrato usaremos un tira de espuma en el cual cubriremos y enrollaremos de manera cuidadosa a la raíz, luego  lo pondremos en el vasito y este al final lo ubicamos en el sistema hidropónico.

Al final de colocar todas las plantas en el sistema de raíz flotante, deberá quedarte algo así.

Cabe mencionar que el recipiente contenedor ya debe tener puesto la solución con el nutriente, eso lo puedes conseguir en cualquier tienda especializada o en todo caso lo puedes preparar tú mismo.

Echarle la solución  nutritiva que le corresponde solo para la cantidad de agua que entra en el recipiente.

Recordar siempre oxigenar la solución nutritiva para potenciar el desarrollo de la planta, si no tienes una bomba sumergible de aire puedes hacerlo de forma manual con un recipiente puede ser una taza, un plato, etc lo que tengas a la mano, lo que harás será sacar agua e inmediatamente regresarla, repetir todos los días esta operación durante 3 minutos 

Lo ideal es tener una bomba sumergible de aire esas que se usan en las peceras con un temporizador funcionando todo el día y descansando en la noche.

A partir de ahora solo queda vigilar y cuidar que el sistema funcione de manera óptima, revisar que no se formen algas, cuando el nivel de la solución nutritiva desciende simplemente aumentarle un poco de agua, mantener un pH de 5.8 constante, revisar todos los días.

Al mes y medio  después de terminar la germinación tus plantas estarán grandes y ya listas para la cosecha, ¡felicidades!